Beatriz Gutiérrez, la mujer que no quiere ser primera dama
México. (Olegario Quintero Informa).- Beatriz Gutiérrez Müller, compañera de Andrés Manuel López Obrador, es originaria de la Ciudad de México y el pasado 13 de enero cumplió 49 años.
En varios momentos ha manifestado disgusto hacia la expresión «primera dama» pues la considera discriminatoria y clasicista.
“Con todos respeto a las que han ocupado este encargo, decir primera dama es algo clasista, todos somos importantes, y es la suma de voluntades la que construye un gran país”, expresó durante un mitin en Veracruz.
Gutiérrez Müller dijo en esa ocasión que «en México no queremos que haya mujeres de primera ni de segunda; no queremos hombres de primera ni de segunda».
De madre chilena, Beatriz nació en la Ciudad de México, pero pasó su infancia y adolescencia en Puebla, donde estudió la licenciatura en Comunicación y la maestría en Letras, ambas en la Universidad Iberoamericana.
Gutiérrez Müller además es doctora en teoría Literaria por la UAM Iztapalapa y, de ratificarse el triunfo de Andrés Manuel, será la mujer con mayor formación educativa y experiencia profesional en acompañar a un presidente de México.
Fue reportera de El Universal en Puebla y ha colaborado en noticieros locales, así como en la revista Nexos.
Ha publicado varias novelas, entre ellas Larga vida al Sol y Dos revolucionarios a la sombra de Madero basados en la vida de Francisco I. Madero, además de Viejo siglo nuevo: un país sumido en la miseria y la desigualdad.
De 2001 a 2005 formó parte del equipo de la Jefatura de Gobierno del entonces Distrito Federal como asesora de comunicación en distintas áreas.
Beatriz conoció a AMLO justo en ese período, cuando el tabasqueño era jefe de Gobierno; en 2004 le ayudó a promocionar el libro Un proyecto alternativo de nación.
Andrés Manuel enviudó en 2003 y se casó con Beatriz el 16 de octubre de 2006; siete meses después nació Jesús Ernesto, el primer hijo de ella y el cuarto de él.
Ha destacado por su constante actividad en redes sociales, donde comparte poemas, se ‘sube’ a las tendencias de Internet y reacciona ante causas políticas y sociales.
Con información de Milenio