Acusa la CEM al gobierno de México de aceptar imposiciones de EU
Ciudad de México.- Dos días después de la visita a México del secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, quien dio visto bueno a los operativos en materia migratoria, la Iglesia católica afirmó que el país “se ha sometido a los criterios e imposiciones del gobierno estadunidense aceptando la incoherencia de unir negocios con el derecho y la necesidad de migrar”.
La Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) reconoció “la necesidad de tomar decisiones valientes para evitar la imposición de aranceles a los productos mexicanos” por parte de Estados Unidos, pero “no en detrimento de la soberanía nacional, la dignidad y el respeto a los derechos humanos de los migrantes, la solidaridad entre los pueblos y el trabajo por el bien común de los países necesitados de apoyo y desarrollo digno”.
En un mensaje dirigido a obispos, presbíteros y en general a la sociedad reiteró su preocupación “por la falta de acogida verdaderamente humanitaria a nuestros hermanos migrantes, que refleje nuestras convicciones en materia de reconocimiento y protección de los derechos de todos los seres humanos por igual”.
Tristemente, abundó, constatamos que esta dignidad como personas “está siendo vulnerada, pues ha sido ‘cambiada por un plato de lentejas’”. Expresó su inquietud por el cambio de política migratoria del gobierno mexicano, “pasando de una actitud de bienvenida, a otra de contención y deportación”.
De igual manera, la CEM acusó que las casas, centros de derechos humanos y personas laicas han sido objeto de actos de hostigamiento, criminalización y obstaculización de las labores de asistencia, protección y defensa de derechos humanos de los migrantes.
Como muestra, expuso, los casos más recientes son los ocurridos en el Centro de Atención al Migrante Exodus, en Agua Prieta, Sonora, y el presunto hostigamiento de integrantes de la Guardia Nacional, o la Casa del Migrante de Saltillo, con elementos de la Policía Federal.
Además, informó que ha habido insistencia por parte de dependencias federales como la Secretaría de Gobernación, el Instituto Nacional de Migración, entre otras, en solicitar información interna a los albergues.
La CEM indicó que el combate a la pobreza y a la desigualdad en México y en Centroamérica “pareciera quedar sustituido por el temor ante el otro, que es nuestro hermano”, señaló.
Expresó su deseo de seguir colaborando con todas las iniciativas que permitan encontrar un camino de mayor seguridad y protección de los derechos humanos de los migrantes.
Con información de La Jornada.