Tras prohibición, se creó mercado negro de cigarrillos electrónicos
Ciudad de México. A pesar de estar prohibida su venta por decreto presidencial, los cigarrillos electrónicos o vapeadores se comercializan en Internet, tianguis que se ubican en los límites de Iztapalapa, Gustavo A. Madero, Iztacalco y Venustiano Carranza con el estado de México, así como en puestos ambulantes cercanos a estaciones del Metro y hasta en algunas tiendas de abarrotes.
En mercados sobre ruedas los dispositivos se venden en su mayoría en puestos donde realizan tatuajes o piercing (perforaciones) en el cuerpo. Tienen un costo en promedio 200 o 300 pesos. En bazares o por Internet el precio se dispara hasta 5 mil pesos, dependiendo del tamaño, la marca y calidad del producto. En la web incluso se venden pipas usadas.
Para los consumidores, estos sistemas electrónicos de administración de tabaco y nicotina son supuestas alternativas a los cigarros tradicionales para dejar de fumar o como una forma de administrar nicotina sin humo.
Con información de La Jornada.