Sergio Torres: La maniobra
Por José Luis López Duarte
Vi a Sergio Torres por allá en el mes de enero y platicamos sobre el escenario político, y la pregunta obligada fue ¿Qué vamos a hacer con nuestros partidos? Porque MORENA ya nos cargó el 2018, se desmoralizó todo el mundo y las dirigencias, en este caso del PRI y del PRD, no se le veía por dónde pudieran irrumpir y construir para el 2021.
Aquellas eran las preguntas que se repetían en charlas con los militantes del PAN, de MC, del PAS y desde entonces Sergio Torres sostenía que el PRI requería cambiar su actitud frente al poder y la militancia.
Se mostraba inconforme con su dirigencia porque coincidimos que el gobierno de AMLO caminaba al fracaso y la oposición no tenía claro que hacer ante ello.
Por eso no fue casual que al poco tiempo empezara a hablar de sus aspiraciones políticas, tanto que le comentamos una vez “lo van a garrotear, amigo”, expresándole metafóricamente que atraería muchos ataques políticos, a lo que respondía que de eso se trataba, “quiero que me echen la perrada” respondía.
“Es necesario hacer ruido, estar con la gente, más ahora que sufre el encierro, si los partidos no estamos con la gente ahora ¿Cuándo vamos a servir?” y agregaba “ahí está el profe Cuén, acaba de salir de un gran problema de salud y no para con la gente, trabaja y trabaja”.
Esas son mis diferencias con el PRI y con mi amigo “Chuy”, “ya necesitamos andar a todo lo que podamos dar por los pueblos y las colonias”, “nosotros, como están los partidos, no podemos esperar a ver que nos dicen, que indicaciones nos dan”, “necesitamos echar chingazos si no ¿Quién nos va a creer?”
Por ello, lo que se dice de que Sergio Torres está fracturando al “Grupo Culiacán”, otrora tan poderoso y que sostuvo por cinco años el gobierno de la capital del estado, no tiene sustento real de fondo.
Sergio Torres ha desatado una campaña para ser candidato a gobernador de Sinaloa y hace lo que debe hacer un prospecto a tal posición: Abrir el diálogo con todos.
Por eso se ha reunido con el PAN, PAS, MC, PRD y no detiene su activismo social promoviendo los programas de su dependencia y promoviéndose él, como el que iba “a misa y vendía las cañas”.
Sin duda el trabajo del secretario de pesca del gobierno del estado le ha ayudado al PRI y lo ha desaletargado, empezando a moverlo y hacerlo sentir, tanto que el precandidato Sergio Torres ha cuestionado a su presidente estatal Jesús Valdez a que renuncie a la presidencia del PRI, más bien inventando un pleito que mucho espacio mediático les va a redituar.
Es cierto que a Sergio Torres le van a contestar “que renuncie a la secretaría de pesca” y también está bien, porque un partido político tiene que estar despierto, vivo, activo, poniéndole el “cascabel al gato” y también “el sabor al caldo”. Lo peor es que los tengan que despertar para que vayan a desayunar.