EL LIBRO DE ROCHA • Este sábado
Por José Luis López Duarte
Este sábado, el maestro Rubén Rocha, el más destacado precandidato al gobierno de Sinaloa por parte de MORENA, estará presentando nueva obra literaria en su ya larga trayectoria, donde expone las ideas de los cambios que impulsaron al sistema educativo nacional con la nueva ley de educación, decretado el año pasado por el congreso de la unión.
El fundamento principal que desarrolla el senador es la reivindicación de la educación como un derecho universal, lo que obliga a los gobiernos a incluir a todos los niños y jóvenes del país en el sistema educativo nacional.
Así mismo, trata también de que esta garantía este acompañada de la identidad y soberanía nacional de un pueblo independiente y democrático, formulando los contenidos de la misma y garantizando la continuidad con la gratuidad que permita el acceso y la permanencia en ella.
Sin duda, el sistema educativo nacional, en su práctica, con el sindicalismo antidemocrático que representa a sus trabajadores, así como la insuficiente inversión del estado mexicano y la corrupción sistémica de la misma, obliga a actuar de inmediato con una planeación que aborde los retos de la globalización y la velocidad de las transformaciones que viven la ciencia y la tecnología, para que esta nueva ley pueda prosperar.
Lograr un cambio como el que indica la reforma educativa, que ha promovido Rubén Rocha, no se podrá desarrollar en las condiciones que hasta ahora se dirige la administración pública en todos los niveles, debido a la existencia de una burocracia corrupta ligada a las vertientes del sindicalismo antidemocrático que domina a los trabajadores de la educación.
Como tampoco se puede soslayar algo que se debatió como un mecanismo de control de la ley de educación anterior, la evaluación de los trabajadores, precisamente porque los cambios que exige esta ley en la educación no se pueden llevar a cabo con indolencia, mediocridad e incompetencia, se necesita un magisterio de vanguardia, de calidad, en el que la ciencia, los métodos y el esfuerzo los distingan.
Hasta ahora esa burocracia corrupta, inepta y atrasada ha dado al traste con muchos esfuerzos de generaciones que se han sacrificado por convertir a la educación como el vehículo por excelencia del cambio y las transformaciones del país, por lo cual no debe continuar ese obstáculo, hasta ahora insalvable.
Sin duda ha sido muy valioso el esfuerzo y la voluntad del senador Rubén Rocha en este sentido, no solo ahora sino durante toda su vida, pero como experto que es del tema sabe perfectamente el gigantesco esfuerzo al que convoca lo que ha impulsado.
Convertir a la educación nacional en el motor de los cambios es prácticamente la construcción de una nueva república. De ese tamaño considero los objetivos de esta reforma educativa, ni más ni menos.