MAZATLÁN: PUCHETA • ¿Una trinchera?
Por José Luis López Duarte
Un abrazo solidario para mis amigos Antenor Torróntegui e Ismael Martínez, quienes han perdido a su madre y a su padre, respectivamente, deseándoles pronta resignación. DEP.
A mis queridas sobrinas, Aida y Arcelia, nuestro más sentido pésame por la perdida de su mamá, Elvia Sainz, DEP.
Donde parece tiene su mayor fortaleza la alianza PRI – PAN – PRD es en el municipio de Mazatlán, tanto por la prioridad que el puerto ha sido para el gobernador Quirino Ordaz, resultando el municipio con la mayor inversión pública en su gobierno, como por el hecho de que por la coalición del PRI compite su mejor carta en todos los municipios, Fernando Pucheta, y por MORENA – PAS pretende la reelección el “químico” Benítez, con lo que implica la reelección en sí misma y una gestión muy cuestionada por parte del amlovista.
Para nadie son un secreto las grandes inversiones del gobernador Quirino Ordaz en su ciudad, incluso con una idea estratégica importante en la construcción de infraestructura en materia de recursos hidráulicos, tanto en el abasto de agua con los trabajos en las presas Santa María, Picachos, las plantas tratadoras de aguas negras, como el drenaje pluvial y la modernización de vialidades, incluido el nuevo estadio y equipo de futbol, todo lo que fortalece la economía del turismo. Punto y aparte sería cómo se ha hecho todo, pero la obra ahí está y fortalece la economía de Mazatlán y Sinaloa.
El caso de Fernando Pucheta es que ha sido por sí mismo un liderazgo con amplia base popular, producto de un trabajo social intenso y sostenido, que perdió la reelección en 2018 ante el “químico” Benítez, es cierto, pero todos sabemos lo que ocurrió en aquellas elecciones y que resultó el triunfo se MORENA, como “el arca de Noé”, donde todos los candidatos ganaron, resultando una elección completamente atípica y que ahora este 2021 no será igual, donde en buena medida los candidatos tendrán que poner en juego lo mejor que tienen.
El “químico” Benítez ciertamente podrá presumir la inversión del gobernador Quirino Ordaz como parte de su gestión, como también la ventaja de su candidato a gobernador en la fórmula MORENA – PAS, Rubén Rocha Moya sobre Mario Zamora del PRI, así como el manto electoral de AMLO que aún perdura y que no ha podido romper la coalición del PRI, es cierto que todo eso puede capitalizar, pero lo que no le ayuda han sido sus desaciertos, una conducta personal poco empática y una personalidad de intolerancia muy recurrente.
Mazatlán, insisto, es quizá el municipio donde el PRI tiene mejores condiciones y posibilidades de ganar, con las debilidades ya advertidas del candidato a gobernador, como también la debilidad de sus candidatos a diputados locales y federales, tanto del primer distrito como el sexto, que tienen su cabecera en el puerto.
Por ello, no será extraño ver al gobernador del estado meterse aún más en la elección, por lo menos en el territorio de Mazatlán, intentando garantizar el triunfo en su tierra.
Fernando Pucheta indiscutiblemente es mejor candidato a presidente municipal que el “químico” Benítez, pero eso nunca es suficiente cuando hay múltiples factores que inciden en la elección, pero por lo menos son puntos a su favor.