ELOTA Y ENCIMA • Con todo
Por José Luis López Duarte
La desesperación del PRI en algunos municipios ya llegó al límite y más en Elota, donde no solo se impuso un junior a la coalición del PRI, sino que además un reconocido “paracaidista” político, el hijo del profe Daniel Amador, dirigente “moral” del magisterio de la sección 53, Tomás Amador, quien ha echado mano de todo su poder caciquil en el sindicato, que desde Culiacán han organizado forzosamente, desde el viernes 7 de mayo, a más de 200 profesores para hacer la tarea electoral en aquel municipio.
Esta fue una práctica del PRI desde siempre, que hasta profesores de otros estados del país llegaban a Sinaloa para realizar labores electorales, práctica que se fue diluyendo con el tiempo, la competencia, la vigilancia y la alternancia política, que se hizo prácticamente normal.
Sin embargo, sorprende ahora que refresquen esas prácticas corporativas y fraudulentas, que a través de ENCIMA (Enlace Cívico Magisterial), la organización personal del profe Daniel Amador, donde agrupa su corriente al seno de la sección 53 del SNTE, se inmiscuya en el proceso electoral prácticamente como un grupo de choque.
Es cierto que en el municipio de Elota les había resultado fácil a los clanes de Daniel Amador y Germán Escobar alternarse el poder político durante los últimos 20 años, tanto en la presidencia municipal, diputación local, como en la diputación federal del sexto distrito, como ahora pretenden con los enroques de Germán Escobar a la diputación Federal por el PRD, en la coalición con el PRI, Tomás Amador a presidente municipal en sustitución de Giovanni Escobar, hermano de Germán, desde el gobierno de Juan S. Millán, pasando por el de Jesús Aguilar y Mario López Valdez, estas dos familias han sido quienes dominan aquella región.
Dominio que pese al movimiento “Somos más que 53” en contra del profe Daniel Amador y su organización ENCIMA al seno del magisterio, que inició en el 2017 ya en el gobierno de Quirino Ordaz, y con el alud electoral de MORENA el 2018, no fue posible derrotarlos, tanto que Giovanni Escobar se reeligió en la presidencia municipal y entonces Faustino Hernández fue el candidato a diputado local.
Al parecer hoy las perspectivas electorales son diferentes a raíz de la división entre los clanes Amador y Escobar, y que no cuentan con la presencia de Faustino Hernández, que está ocupado en su lucha por Culiacán.
Ecuación que hasta el 5 de mayo pasado sostenía un triple empate en las preferencias para la presidencia municipal, entre Viridiana Camacho de MORENA – PAS, a dos puntos Ana Karen Vall del PT y en tercer lugar, a tres puntos, Tomás Amador del PRI.
He ahí la causa, razón o motivo, como usted quiera llamarle, de la reacción del profe Daniel Amador de movilizar al magisterio de ENCIMA de otros municipios para ver si rescata a su hijo Tomás de una posible derrota. Así funcionaba, y de nuevo, con los nuevos, pretenden lo mismo, veremos si les da en la recta final.
