Una de las grandes obras del sexenio, el Tren Maya, se ha topado con dificultades 

Ciudad de México.- El Tren Maya, la obra emblemática del Presidente Andrés Manuel López Obrador para el sureste mexicano, ha arrancado 2022 entre tropiezos por los cambios de la ruta y del encargado del proyecto, las dudas sobre su entrega a tiempo y las denuncias de comunidades.

Preocupado por el retraso de la obra, el mandatario nombró en enero pasado a Javier May, uno de sus hombres de confianza, como titular del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), organismo público encargado del tren, que debe estar listo en diciembre de 2023.

Esto después de que el antiguo titular, Rogelio Jiménez Pons, admitió en una entrevista con Efe en noviembre pasado que la obra afrontaba “cinco meses de retraso” por recursos legales de pueblos originarios, burocracia e inestabilidad en el terreno.

Además, en octubre pasado Jiménez Pons reconoció ante el Senado que el costo de la obra había crecido en 60 mil millones de pesos (más de  dos mil 900 millones de dólares) hasta los 200 mil millones de pesos (unos nueve mil 730 millones de dólares).

“En diciembre del ’23 vamos a estar inaugurando todo el Tren Maya, los mil 500 kilómetros”, aseveró, no obstante, López Obrador el pasado fin de semana de gira en Cancún.

Con información de Sin Embargo