“No vamos a parar”: dueños de Maple denuncian en Fiscalía caso del perrito 

En entrevista para EL UNIVERSAL, Adriana comentó que luego de que los encargados del campamento canino You Can Trainig Dog, les entregaran la urna y se dieran a la fuga, decidieron denunciar y averiguar qué pasó con Maple realmente

El caso del perrito Maple, que fue llevado a un campamento para entrenarlo y fue regresado hecho cenizas en una urna, ya está en manos de las autoridades.

Adriana Mondragón, la humana de Maple, junto con su pareja David Popome ya interpusieron el sábado pasado una denuncia ante la Fiscalía Especializada en Delitos Ambientales y Protección Urbana (FEDAPUR), luego de que el campamento de entrenamiento perruno ubicado en la alcaldía Xochimilco, le entregara lo que les dijeron eran las cenizas del perro tras la supuesta muerte del animalito y posterior cremación sin consentimiento de Adriana..

En entrevista para EL UNIVERSAL, Adriana comentó que luego de que los encargados del campamento canino You Can Trainig Dog les entregaran la urna y se dieran a la fuga, decidieron tomar carta en el asunto.

“Levantamos una denuncia primero a la PAOT, pero como Maple ya estaba muerto, nos indicaron que la denuncia se tendría que interponerse ante la Fiscalía de Delitos Ambientales, por maltrato animal, hasta ahora estamos llevando los procesos correspondientes para aclarar el caso, no vamos a parar”, dijo.

Sospechan muerte de Maple

Adriana Mondragon explicó que luego de recibir la urna con las supuestas “cenizas” de Maple sin ningún certificado u objeto personal del can que acreditara la veracidad de la mascota, les quedaron dudas acerca de que se tratara de su mascota.

“No tengo certeza de lo que realmente pasó con Maple, si sigue con vida, si lo vendieron o está muerto”, dijo angustiado David Popomeya.

Señaló que al recibir la urna, se percataron que no tenía datos personales del perro o de la familia y mucho menos nada relacionado con la clínica veterinaria que realizó la incineración, “estaba en blanco”.

“No nos entregaron ni la placa, ni la pelota que le enviamos y ninguno de sus juguetes, más que la urna”, indicó.

David y Adriana, con el corazón roto, decidierón acudir a distintas funerarias caninas, para obtener alguna respuesta, pero al explicarles lo sucedido, les indicaron que ningún animal podía haber sido cremado en menos de una hora, y mucho menos de la manera como los responsables del campamento se los hicieron llegar.

“No es posible hacer la incineración en menos de una hora, nos tenía que pedir nuestra autorización, y además en el contrato solo decía que en caso de morir el perro, se debía hacer una necropsia, en ningún momento hubo una cláusula que dijera lo de una incineración”.

Hasta el momento los dueños de Maple, están en la espera de conseguir ayuda para saber la veracidad de las cenizas.

Con información de El Universal