Jaime Barrera narra cómo lo ‘levantaron’; «llegaron 5 y me encañonaron»
El periodista Jaime Barrera Rodríguez dio sus primeras declaraciones a medios luego de haber sido liberado la madrugada de hoy 13 de marzo de 2024, dos días después de haber sido levantado por sujetos armados al salir de la radiodifusora en la que trabaja al concluir su programa de radio, quienes lo obligaron a descender de su vehículo y subir a una camioneta en la que se lo llevaron hasta un lugar en el que lo tuvieron privado de su libertad.
“El lunes iba saliendo del programa de radio a las 2 y como esto pasa de repente, las fauces de la delincuencia se asoman y te escupen en la cara y ya no sabes qué hacer ¿no? Fue una odisea larga, terrible, pero afortunadamente terminó bien”, dijo el periodista a unas horas de haber sido liberado en el municipio de Magdalena.
Barrera Rodríguez recordó que fueron cinco sujetos armados los que lo encañonaron cuando estaba en su coche y lo obligaron a subir a una camioneta en la que se lo llevaron y en la que durante el trayecto sus captores le reclamaron por los textos que escribía.
«Ni siquiera tuve tiempo de prender el auto, es una dinámica como ya conocida, un coche adelante por si yo trataba de arrancar, un camioneta al lado. De repente llegan cinco encañonándote a tu coche y tú ahí debes decidir si subes o te quedas ahí, pase lo que pase”, dijo en entrevista con Azucena Uresti.
El periodista aseguró que nunca pudo ver nada, ya que desde que lo privaron de su libertad le vendaron los ojos y le ataron las manos, además de que lo tuvieron hincado la mayor parte del tiempo y algunas veces acostado.
“Te acuestan en el asiento trasero (de la camioneta). Estuve en cautiverio con los ojos vendados, con la manos amarradas, hincado la mayor parte del tiempo y luego acostado, con un poco de agua”, detalló a Ciro Gómez Leyva en Radio Fórmula.
El comunicador y conductor de un noticiero en Jalisco consideró que fue el movimiento de todo el gremio y de todas las personas que se solidarizaron tras conocer que había sido raptado y que llevó a que se manifestaran ayer lo que permitió que quienes lo privaron de la libertad finalmente lo dejaran ir, no sin antes hacerle algunas advertencias.
“Me dijeron que si no cumplía cosas o no le bajaba ya sabían dónde vivo, quiénes son mis hijos o dónde me muevo, en fin es algo que se tiene que decir y que seguramente no les está gustando, pero hay que decirlo y hay que exigir más protección y estar más cuidado en este proceso electoral que viene. En 34 años no me ha sucedido eso”, expresó.
Agregó que ante los cuestionamiento de quienes lo privaron de la libertad desde la tarde del lunes sobre por qué escribía lo que escribía, el comunicador les aseguró que nadie le da instrucción y que no escribe por consigna.
El periodista aseguró que quienes se lo llevaron no lo maltrataron tanto físicamente, sólo al final le dieron unos tablazos, y todo el tiempo en cautiverio tuvo los ojos tapados y las manos atadas.