¿Cuáles son las consecuencias de dormir con el aire acondicionado prendido?

En temporada de calor, es frecuente el uso de aire acondicionado, ya que este ayuda a controlar la temperatura, la humedad y la calidad del aire en un espacio interior. Sin embargo, algunos sistemas de aire pueden generar problemas de salud en algunas personas, pues no todos cuentan con filtros para purificar el aire, lo que puede causar que las partículas de polvo, polen y otros alérgenos fluyan.

De hecho, un mal uso del aire acondicionado puede provocar alergias, enfermedades o empeorar padecimientos, por lo que aquí te contamos qué consecuencias puede causar no limpiar y darle mantenimiento adecuado a este sistema, sobre todo cuando dormimos o lo usamos por mucho tiempo.

Aunque dormir con el aire acondicionado puede tener beneficios como mejorar la calidad de sueño, regularizar la temperatura corporal, evitar el sudor y refrescar el ambiente, la realidad es que también puede causar problemas de salud, ya que se ha comprobado que puede generar resequedad en los ojos, la piel, la garganta, la nariz y los oídos, sobre todo cuando se usa por mucho tiempo.

Pese a que el aire acondicionado no es capaz de enfermar por sí solo, la realidad es que puede resecar el aire, lo que lo que irritar las vías respiratorias causando sequedad en la garganta y la nariz. De hecho, esto puede ser muy malo para la salud respiratoria, sobre todo para quienes tienen problemas de salud como el asma o la sinusitis, ya que agravará sus síntomas.

Al igual que con las vías respiratorias, el aire seco generado por el aire acondicionado puede causar sequedad en la piel, especialmente si se usa durante largos períodos de tiempo, por lo que se recomienda usarlo moderadamente, ya que puede provocar irritación y descamación en algunas personas, sobre todo las de piel sensible o con enfermedades cutáneas.

Otra de las consecuencias de usar aire acondicionado por mucho tiempo, es que puede secar el cerumen en los oídos causando bloqueos que pueden causar dolor o infecciones, en el peor de los casos.