Ecuador aplaude que CIJ rechace medidas cautelares solicitadas por México
El Gobierno de Ecuador acogió con beneplácito la decisión unánime de la Corte Internacional de Justicia(CIJ) de La Haya de rechazar las medidas cautelaressolicitadas por el Gobierno de México con respecto a la invasión de la Embajada mexicana en Quito el pasado 5 de abril por parte de la Policía ecuatoriana para detener a Jorge Glas, exvicepresidente de Rafael Correa (2007-2017), a quien horas antes se le había otorgado el asilo.
En un comunicado, el Ministerio de Relaciones Exteriores y Movilidad Humana de Ecuador manifestó que este fallo del tribunal internacional “confirma el carácter innecesario de la solicitud” realizada por el Gobierno del presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador.
Las medidas cautelares solicitadas por México buscaban que los jueces de la ONU ordenaran a Ecuador respetar y proteger a su personal y sedes diplomáticas, lo que el Gobierno ecuatoriano ya había garantizado por escrito durante las audiencias sobre las medidas cautelares celebradas a principios de mes.
“La solicitud de México se hizo sin tener en cuenta las repetidas seguridades de Ecuador de que brindaría plena protección y seguridad a los locales, bienes y archivos de la Embajada de México, y que permitiría a México retirar todas esas propiedades de los locales y residencias privadas de sus agentes diplomáticos. Ecuador mantiene su posición”, reiteró la Cancillería ecuatoriana.
Asimismo, el Ejecutivo ecuatoriano valoró que “la Corte reconoció que se debe presumir la buena fe del Ecuador y dejó en claro que las presentes circunstancias no presentan ningún riesgo para los derechos de México bajo la Convención de Viena”.
También recordó que la irrupción a la Embajada de México en Quito se hizo para que evitar que Glas saliese “ilegalmente del país y escape de la Justicia”.
“Desde entonces, el señor Glas ha regresado a prisión para continuar cumpliendo las sentencias condenatorias dictadas en su contra por la Corte Nacional de Justicia por la comisión de graves delitos de corrupción (asociación ilícita y cohecho)”, enfatizó la Cancillería.
Glas llegó a la embajada mexicana el 17 de diciembre de 2023 para solicitar asilo, ya que rechaza los cargos y acusaciones en su contra y se declara un perseguido político y víctima de ‘lawfare’ (utilización del aparato judicial contra adversarios políticos).
Con información de EFE