“La UAS no me juzgó y me brindó su apoyo”; Loranda Calderón, madre adolescente cobijada por la UAS que hoy es una reconocida investigadora
Siendo discriminada por su condición de quedar embarazada a la edad de 14 años cuando aún cursaba su nivel secundaria y expulsada, porque así lo establecían las reglas en las escuelas públicas de ese nivel en aquellos años, sus buenas notas, calificaciones y la solidaridad de sus profesores que vieron en ella su capacidad y potencial fue lo que permitió que pudiera culminar sus estudios de secundaria. Sin embargo, el deseo de superación bajo esta condición no la detendría para abrirse camino y forjarse un futuro en la investigación.
Se trata de Loranda Calderón Zamora, miembro del Sistema Nacional de Investigadores (SNI) nivel 1, profesora de la Facultad de Biología, integrante del cuerpo académico de Genómica Funcional para la Identificación de Compuestos Terapéuticos y madre de tres hijos, quien compartió su historia; expresó que su camino no ha sido fácil, pero gracias al apoyo de la familia y a una institución que no la juzgó por su condición y la cobijó, a la cual le debe todo, hoy se encuentra en un nivel cómodo que disfruta como madre e investigadora.
“El que la Universidad no me haya juzgado ha sido un agradecimiento enorme, porque sin ese apoyo que la Universidad me brindó yo no hubiera podido estudiar Yo me pude haber quedado sin estudios y sin superarme académicamente y mi pasión era la investigación, desde niña me veía haciendo investigación, pero pasan circunstancias y fui mamá joven, pero la Universidad no me juzgó e ingresé a la Prepa Allende”, dijo.
Esta oportunidad no la dejaría pasar, recordó que se enfocaría en sus estudios, dónde cursaría sus tres años de bachillerato, migrando a la licenciatura por 5 años más como química farmacéutica bióloga. Posteriormente se iría a la maestría y al doctorado, todo ello con un objetivo: cumplir su sueño de ser investigadora, por lo que viajaría a la Ciudad de México para cursar el Doctorado de Investigación y Medicina en el Instituto Politécnico Nacional, para entonces madre de dos hijos.
El proyecto de vida no sería fácil, pero tenía claro que para poder escalar socialmente y brindar mejores oportunidades a sus descendientes, la única forma por este bien común era formarse académicamente, llegando a concluir su proyecto en el 2017, lo que le valió ingresar por sus indagaciones al Sistema Nacional de Investigadores, una ventana que le abriría incorporarse a esta su máxima casa de estudios como docente e investigadora.
Conjugando la vida laboral, el trabajo de casa y sus investigaciones, un día normal en la vida de Zamora inicia a las 5 de la mañana y concluye a media noche; una forma de retribuirle así a la Universidad, mencionó, es realizar sus proyectos de investigación pertinentes para resolver problemas de salud desde hipertensión hasta cáncer, diabetes y síndrome metabólico.
“Es un proyecto de frontera que se nos aprobó en la convocatoria 2022 es para identificar esas dianas o genes que están involucrados en dos enfermedades como la diabetes y la hipertensión. Estamos buscando esa molécula clave para diseñar fármacos para las personas que tienen ambas condiciones”, señaló.
Calderón Zamora, consciente de todos los procesos por los que pasa la mujer, a modo de mensaje en este día tan especial para celebrar a la madre exhortó a las jóvenes que se identifiquen con ella, así como a madres de familia que por motivos distintos truncaron sus estudios a no desistir de sus objetivos y sueños, que con esfuerzo ganas y una red de apoyo como lo es la familia, que los cobije, traten de cumplir su sueño y superarse.
“La Universidad nos permite escalar socialmente, no desistan aun cuando tengan hijos grandes, la Universidad tiene muchas licenciaturas que son semiescolarizadas y nocturnas, les da esa facilidad de estudiar; las invito a que se acerquen a la Universidad”, expresó.
“Todos estos logros orgullosa los comparto, agradezco a mis padres principalmente y a mi familia, que es mí esposo y mis tres hijos: Gabriel, Paquito y Tadeo, por ser mi gran red de apoyo. Por todo lo que soy, estoy agradecida con mí Universidad, la Autónoma de Sinaloa, tengo mi identidad y mi águila tatuada, la voy a defender siempre”, finalizó.