Bebé nace con dos caras, cuatro piernas y cuatro brazos en evento único en la medicina
En un caso médico extraordinario y desafortunado, un bebé nació en la India con una condición congénita extremadamente rara que lo hizo tener dos caras, cuatro brazos y cuatro piernas.
La noticia, divulgada por el medio DailyMail, captó la atención mundial debido a su inusual naturaleza y la trágica circunstancia que rodea el nacimiento.
La madre del bebé, Rama Devi, de 38 años, comenzó a experimentar dolores de parto intensos y fue rápidamente trasladada a un hospital rural en estado de urgencia.
A pesar de la preocupación inicial, el parto transcurrió sin complicaciones mayores. Sin embargo, lo que debería haber sido un momento de alegría se convirtió en sorpresa y consternación para los médicos presentes.
Según el informe del medio, los médicos se sorprendieron al descubrir que el bebé había nacido con características inusuales. «El bebé había nacido junto con otro cuerpo parcialmente desarrollado, lo que provocó que el niño presentara dos pares de caras, piernas y brazos», detalló el medio. Para quien no lo sepa, este fenómeno, conocido como gemelo parásito, ocurre cuando uno de los gemelos no se desarrolla completamente y queda incorporado en el cuerpo del gemelo sobreviviente.
El personal médico del hospital estaba atónito y tomó la decisión de trasladar al bebé fuera de la unidad de cuidados intensivos debido al desconcierto y caos generado por la situación. La condición del bebé hizo que fuera imposible para él consumir leche por sí solo, lo que contribuyó a su fragilidad.
Desafortunadamente, el bebé no sobrevivió más allá de cinco horas después de su nacimiento. Las causas exactas de su fallecimiento aún no se han revelado, pero la falta de desarrollo completo y la incapacidad para alimentarse de manera autónoma fueron factores determinantes en su corta vida. Hay que subrayar que este no es el primer caso documentado de un bebé nacido con múltiples extremidades debido a una condición similar.
En 2017, una niña en Costa de Marfil nació con cuatro pies y dos espinas vertebrales, resultado de un gemelo parásito. La niña, llamada Dominique, fue sometida a una compleja cirugía de separación en el Advocate Children’s Hospital en Chicago.
El procedimiento, que duró seis horas y requirió la participación de cinco cirujanos, fue exitoso y permitió a Dominique vivir una vida más saludable y funcional.
El caso del bebé en India destaca la complejidad y el misterio de las condiciones congénitas raras, así como la importancia de la atención médica especializada en el manejo de tales situaciones.
Aunque el destino del pequeño fue trágico, su nacimiento pone de relieve la necesidad de apoyo y recursos para tratar estas condiciones inusuales y apoyar a las familias afectadas.