Halla el cuerpo de su hijo entre cadáveres apilados en Semefo de Guerrero…cinco años después
Guerrero. (Olegario Quintero informa).- La carencia de recursos para elaborar perfiles genéticos de víctimas en esta entidad obliga a las autoridades ministeriales a resguardar los cadáveres en la Unidad del Servicio Médico Forense (Semefo) hasta más de cuatro años.
Es el caso de lo que sucedió con el médico de 32 años, Hiram Avid Adame Valencia, quien fue secuestrado y asesinado el 15 de enero de 2013 en esta capital y su cuerpo permaneció más de cuatro años en el Semefo, en calidad de desconocido.
Después de un largo peregrinar, donde enfrentó la omisión e indiferencia gubernamental frente al tema de los desaparecidos, su madre recuperó el cuerpo del médico apenas el 12 de diciembre pasado.
“Estuve buscando a mi hijo cuatro años, 10 meses y 27 días, después de que un grupo de delincuentes lo secuestró y asesinó vilmente. Después de que toqué la puerta del gobernador Héctor Astudillo y nunca fui escuchada”, narró en entrevista la mujer a Apro.
El cuerpo del profesionista permaneció más de cuatro años en la unidad del Servicio Médico Forense (Semefo) de Chilpancingo , en calidad de desconocido porque las autoridades ministeriales dicen que no cuentan con recursos para la elaboración del perfil genético de víctimas y al gobierno “no le interesa” resolver este problema que se vive en Guerrero, reprochó la madre del médico.
Funcionarios del gobierno estatal han reconocido que a la fecha suman más de 600 cuerpos que permanecen sin identificar en las unidades del Semefo de Iguala, Chilpancingo y Acapulco ante la falta de recursos para cumplir con los protocolos de identificación y en condiciones inadecuadas.
La identificación del cuerpo del médico Hiram Avid Adame Valencia, se dio luego de que sus familiares decidieron presentar una denuncia ante instancias federales porque no confían en las autoridades estatales, indicaron en entrevista.
Fue entonces que la Comisión Nacional de Seguridad (CNS), intervino a través de la División Científica de la Policía Federal (PF) y después de realizar estudios de genética forense en uno de los tantos cuerpos que están acumulados en el Semefo de Chilpancingo, identificaron al joven médico secuestrado y asesinado cuatro años antes, explicó la madre.
La mujer que apenas está viviendo el martirio del duelo después de la búsqueda infatigable de su hijo, actualmente forma parte de un colectivo nacional de familiares de personas desaparecidas que exigen a las autoridades que asuman su responsabilidad ante el drama que se vive en el país.
Con información de Proceso