Fotografías revelan que policías de Veracruz ejecutaron a dos adolescentes de 16 y 14 años
Veracruz. (Olegario Quintero Informa).- Una foto difundida a través de redes sociales por testigos de una matanza en Río Blanco, Veracruz, muestra a una de dos jóvenes viva y sin armas junto a un policía de esa entidad, lo que podría confirmar la versión de que las dos hermanas fueron víctimas de una ejecución extrajudicial.
El Gobierno de Miguel Ángel Yunes, del Partido Acción Nacional (PAN), no ha desmentido ni aclarado la situación, algo que suele ser muy común en ese estado.
La familia de las hermanas Nefertiti y Grecia Camacho Martínez, de 16 y 14 años de edad, dicen que las dos menores de edad fueron ejecutadas por policías en Río Blanco, Veracruz.
Testigos citados por la prensa local coinciden en que las adolescentes tenían tiros de gracia. Según la policía, las dos mujeres de 14 y 16 años “eran criminales”.
La foto muestra a la joven sentada, sin armas, y no parece representar amenaza alguna para los policías. Poco después, otra foto la muestra desangrándose en la banqueta, ya sin vida.
Las hermanas Nefertiti y Grecia Camacho Martínez, de 16 y 14 años de edad, habrían sido ejecutadas por policías en Río Blanco, Veracruz. De acuerdo con Plumas Libres, un medio local, las jóvenes iban al cine y que quedaron en medio del enfrentamiento. “En las redes se afirma que ellas intentaron explicar que únicamente pasaban por el lugar pero recibieron disparos a quemarropa. En una de las fotografías que ha circulado, se observa a una de las menores sentada y sin armas y posteriormente tirada sobre la banqueta ya muerta”.
“De acuerdo con esas versiones –agrega Plumas Libres–, los familiares de las hermanas exigirán que se les realicen estudios para probar que ellas no accionaron ningún arma de fuego. Conforme a diversas fotografías que circulan, la sospecha es de que el escenario de los hechos fue alterado y se sembraron armas”.
No sería la primera vez que agentes de la policía de Veracruz son acusados de ejecutar a civiles. Esas fuerzas policiales han sido señaladas de operar escuadrones de la muerte que dieron muerte, durante estos años, a decenas de ciudadanos, muchos de ellos jóvenes.
A finales de febrero se dio a conocer que la policía del estado de Veracruz, infestado de corrupción, creó unidades que empleó tácticas de guerra sucia para secuestrar, matar y hacer desaparecer a por lo menos 15 personas, en su mayoría jóvenes, sospechosas de ser informantes y “mulas” de los cárteles del narco, de acuerdo con acusaciones presentadas por la procuraduría estatal.
Las denuncias presentadas contra ex jefes de la policía de Veracruz muestran todas las señales de las violaciones de derechos humanos de las tristemente célebres campañas contra las guerrillas en los años de 1960 y 1970. La policía en sus patrullas recogía a los jóvenes, pero no registraba los arrestos. Los entregaba a escuadrones especializados en interrogatorios y torturas que funcionaban en la misma academia de policía, que luego los mataban y hacían desaparecer los cuerpos, según el acta de acusación.
De la nueva foto, Plumas Libres señala que “la imagen también confirma que no hubo ningún enfrentamiento tal y como se difundió en la información oficial, al menos esta menor que fue ejecutada, se ve con la cabeza hacia abajo, no estaba corriendo, ni llevaba ningún arma”.
Fue el sábado 10 de marzo. Las menores se hallaban en calles de la colonia Benito Juárez, en el municipio veracruzano, cuando fueron asesinadas a quemarropa, de acuerdo con información de medios locales.
Al principio, se manejaron los hechos como un enfrentamiento entre policías y civiles armados. Los uniformados marcaron el alto cerca de la Plaza Comercial, en Río Blanco, a una camioneta Honda. Pero los jóvenes [cinco] que iban a bordo respondieron con balas. La gente que estaba cerca huyó.
De acuerdo a la versión de testigos, las mujeres intentaron explicar que sólo pasaban por el lugar y nada tenían que ver con grupos delictivos. Sin embargo, los uniformados accionaron sus armas. Ocurrió cerca de las 16:00 horas. Y no sólo las hermanas murieron, hubo una víctima más y un detenido.
Los hechos han causado indignación entre los pobladores. Condenan la muerte de las hermanas. Lamentan que sus vecinas hayan sido asesinadas a mansalva. Sólo eran unas niñas. Y se presume que, tras las primeras detonaciones, recibieron el tiro de gracia.
Las víctimas, Nefertiti y Grecia, sólo iban al cine. Verían una película, informó la familia. Demandan, además, que el Gobernador Miguel Ángel Yunes Linares realice las pruebas correspondientes para que se determine si estaban o no armadas.
La escena del crimen, según las primeras versiones, fue alterada por elementos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) estatal.
El 15 de noviembre pasado, durante la presentación de su primer Informe como Gobernador, Yunes Linares reconoció que la inseguridad se mantenía como un “problema grave” en la entidad.
Linares afirmó en aquella ocasión que “las ejecuciones derivadas de enfrentamientos entre bandas de delincuentes organizados incentivan la percepción de inseguridad”.
Pero las cifras oficiales hablan por sí solas: la administración del panista superó en 2017 las cifras históricas de homicidios intencionales, secuestros y robos de vehículo con violencia.
Organizaciones civiles y especialistas reprobaron ese 2017, el primer año de la gestión del panista, en los rubros de seguridad y procuración de justicia. Los activistas recordaron que Yunes Linares se comprometió en su campaña a cambiar la situación de violencia e impunidad en los primeros 6 meses. Y no.
El año 2017 fue el más violento en una década en México, de acuerdo con datos difundidos en enero pasado por el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP).
Con información de periodico central