Ana Paula Jiménez y Nuria Sydykova, las mexicanas de oro y plata en la Olimpiada de Matemáticas
Cuatro jóvenes mexicanas participaron en la VIII Olimpiada Europea Femenil de Matemáticas, que se llevó a cabo del 7 al 13 de abril en Kiev, Ucrania, donde obtuvieron una medalla de oro y dos de plata.
Ana Paula Jiménez y Nuria Sydykova Méndez, de la Ciudad de México participaron por tercera vez en la competencia, con sus compañeras Karla Rebeca Munguía y Nathalia del Carmen Jasso, con lo que posicionaron a México en el décimo lugar del certamen.
Ana Paula, estudiante de segundo grado de preparatoria en el Churchill College, quien comenzó a participar desde que estaba en primero de secundaria en las Olimpiadas de Matemáticas, consiguió la presea dorada tras lograr plata en 2017 y 2018, y con ello obtuvo el segundo oro en la historia de México en esta competencia femenil.
Considera que su participación en las competencias le ayudó a mejorar su desempeño en álgebra. Además, ahora ya se atreve a resolver los problemas.
En entrevista con Notimex, afirmó que su dedicación y el apoyo de la familia fue lo que la impulsó a ganar el oro este año. “Me dije: vamos por más. Ya son dos años con plata, con 22 puntos. Quería mejorar, obtener algo más alto y me puse a entrenar”.
En 2016, Nuria representó a México en la International Mathematics Competition, efectuada en Tailandia, donde obtuvo su primera medalla de bronce, sumó la segunda en la European Girls’ Mathematical Olympiad en 2017 y en 2018 obtuvo la plata.
Ambas forman parte del programa académico de la Olimpiada Mexicana de Matemáticas, que impulsa la Sociedad Matemática Mexicana y, desde hace años, entrenan en el Instituto de Matemáticas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) de cinco a ocho horas diarias.
Los entrenamientos, que constan de problemas matemáticos similares a los de la competencia, se llevan a cabo con los participantes pre seleccionados de los demás estados, intercambiando así técnicas y aprendizajes que las conducen a un óptimo desempeño dentro de la contienda.
“Antes, para llegar a esos entrenamientos nacionales debemos resultar seleccionadas en nuestros estados y luego en la Olimpiada Mexicana de Matemáticas y obtener un buen lugar para ser pre-seleccionadas en representación de México.
Posteriormente, la Olimpiada Mexicana de Matemáticas nos invita a los entrenamientos que se llevan en diciembre, enero, marzo, mayo y agosto” expresó Nuria.
Contenta con haber obtenido el décimo lugar, dijo que “ya terminé mi ciclo como participante; después, cuando termine la preparatoria voy a estudiar la licenciatura de matemáticas en la Universidad de Guanajuato y quiero seguir involucrada pero ahora preparando a los más jóvenes”, señaló la alumna del Instituto Politécnico Nacional que actualmente estudia para técnica en Programación.
Mientras, Ana Paula adelantó que aún participará el próximo año con el objetivo de mejorar su posición y resultados dentro de la competencia, y comentó a Notimex su deseo por estudiar Matemáticas puras en la UNAM.
Isabel Hubard, investigadora del Instituto de Matemáticas de la UNAM y delegada en la Ciudad de México de la Olimpiada Mexicana de Matemáticas, fungió como líder del equipo mexicano y resaltó la importancia de la inclusión de las mujeres en estas competencias, pues “este trabajo en equipo es muy valioso, sobre todo entre las mujeres, apoyarse las unas a las otras también es un trabajo sumamente importante en este mundo.
En la realidad en la que vivimos, en donde las mujeres somos la minoría en las matemáticas y en las ciencias en general, el tener ese apoyo de nuestras pares es muy importante, el ver que no estamos solas y eso nos ayuda a no dejar lo que estamos haciendo, si no a querer seguir adelante”.
Además de formar parte de la Olimpiada de la Ciudad, en 2013, Hubard participó como coordinadora en la Olimpiada Centroamericana y dijo que los entrenamientos y participaciones se llevan a cabo con ayuda de académicos, de los cuales la mayor parte son voluntarios, por lo que se vuelve un reto conseguir apoyos.
“Este año estuvimos a punto de no ir a la Olimpiada femenil porque no teníamos suficientes apoyos. Unas semanas antes Casa Córdova nos apoyó con una parte, ya cerca del concurso las escuelas de las chicas con boletos de avión.
Estábamos sufriendo porque Conacyt no nos confirmó el apoyo, hasta en el momento. Ahorita tenemos dos equipos comprometidos a una competencia internacional en Sudáfrica y aún no hay boletos para estos chicos”, puntualizó.