COEPRISS realiza jornadas de concientización para armonizar la relación de las personas con los animales
Culiacán, Sinaloa .- La Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios de Sinaloa (COEPRISS), realiza jornadas permanentes de saneamiento y concientización entre la sociedad para armonizar la relación de las personas con los animales, ya sea domésticos, silvestres o en situación de calle, y evitar problemas de salud pública.
Jorge Alan Urbina Vidales, titular de COEPRISS, precisó que en fecha reciente se atendieron reportes ciudadanos en el sector de Acueducto II en Culiacán sobre la muerte de animales que se presume fueron envenenados por lo que se implementaron los protocolos sanitarios, jornadas de saneamiento correspondientes y búsqueda de cebo con plaguicida en techos y casas. “Es necesario advertir a las personas que envenenan deliberadamente a los animales que eso es un delito que puede llegar a castigarse con cárcel”, expresó.
Personal de COEPRISS verificó, en primera instancia, el levantamiento de los cuerpos de los animales y llevo a cabo acciones de saneamiento con cal para evitar cualquier riesgo sanitario. Se tuvo conocimiento de la muerte de casi veinte gatos, una docena de aves y por lo menos dos perros a finales de mayo y principios de junio.
“Trabajadores de COEPRISS mantienen bajo vigilancia sanitaria el sector Acueducto II luego de realizar un protocolo de inspección minuciosa, capacitación a los vecinos sobre el manejo de los animales muertos y muestreo para identificar la posible causa de envenenamiento, aunque no se encontraron cebos en los espacios revisados”, comentó.
Expresó que utilizar cebos envenenados para el exterminio de animales en situación de calle y domésticos es un fenómeno extendido en todo México que puede representar un delito sancionado legalmente no únicamente por maltrato animal sino por el uso ilegal de veneno y un daño que, además de ser afectivo, puede ser económico, ambiental y sanitario.
Cuatro pasos para evitar el envenenamiento de la mascota
1. Evitar que la mascota ingiera alimentos de la calle.
2. Educar al animal para que solo acepte el alimento que le ofrecen sus dueños.
3. En caso de recibir amenazas y sospechar que una persona coloca veneno en la vía pública, ponerlo en conocimiento de la autoridad, de preferencia junto con pruebas (testigos, fotografías).
4. Ante la más mínima sospecha de que la mascota ha resultado envenenada, acudir al veterinario.