Usando la receta familiar, Margarita vende capirotadas
Culiacán, Sinaloa.- Tras crecer en una familia que siempre conservó sus tradiciones regionales en cuanto a gastronomía, Margarita de Figueroa aprendió a hacer capirotadas caseras ayudando a su madre y después ella misma comenzó a preparar para sus hermanos, hijos y posteriormente, para venderlas por pedido.
Margarita compartió que desde que tenía 10 años, junto con sus hermanas ayudaba a su madre con la preparación de las capirotadas durante la cuaresma, sin embargo, fue hasta los 25 años cuando hizo su primera capirotada, pues recordó que sus padres salían de viaje y ni a ella ni a sus hermanos les gustaba esperar a su mamá para degustar de dicho postre.
“Nosotras desde chicas mirábamos a mi mamá y así se va pasando de generación en generación, es un platillo muy típico y tradicional en esta época de cuaresma, (…) nos gusta mantener esas tradiciones y nos gusta irlas transmitiendo, (…) mis papás se iban por temporadas y nunca la había hecho yo sola, repartí las porciones y se las llevé a mis hermanos, (…) y me animé a hacerlas yo sola, cuando no estaba mi mamá la hacíamos nosotros”, afirmó.
Precisó tiene dos años vendiendo capirotadas, pues señaló que anteriormente solo las hacía para regalar, sin embargo, la elaboración no le reflejaba ganancias, por lo que optó por venderlas para cubrir el costo de los ingredientes.
“Yo no tengo un negocio de la capirotada, se las vendo a mis hermanos y vecinos, (…) la hacíamos y las repartíamos entre los hermanos, (…) hace un par de años pensé en recuperar lo invertido, porque sí tiene su costo preparar una buena capirotada, (…) no las promociono en abarrotes, es más a nivel familiar, sobre pedido”, detalló.
Finalmente, Margarita agregó que todos los viernes de la cuaresma realiza una tanda semanal de 10 kilos de capirotada, cuyo precio es de 120 pesos por kilo e indicó que para solicitarle un pedido, sus clientes la contactan a su número telefónico 6672291299.