Edomex, CdMx, Morelos, Puebla y Oaxaca, con mayor número de linchamientos: Senado

El Estado de México, Ciudad de México, Morelos, Puebla y Oaxaca son las entidades que registran el mayor número de linchamientos en el país, señala el Senado de la Republica.

El más reciente de estos ocurrió el 10 de junio pasado, cuando pobladores de la comunidad de Papatlazolco, en el municipio de Huauchinango, en Puebla, retuvieron a Daniel Picazo, abogado y funcionario de la Cámara de Diputados, al que golpearon y después quemaron vivo.

Un estudio del Instituto Belisario Domínguez del Senado, titulado “Linchamientos en México”, elaborado por Juan Pablo Aguirre Quezada, refiere que la justicia por propia mano está asociada a los siguientes delitos: 50 por ciento por robo; 16.2 por ciento por atropellamiento y otros accidentes viales; mientras que entre 6 y 7 por ciento por denuncias de violación, asesinato o secuestro.

Indica que en los últimos 26 años se registraron al menos 366 linchamientos en distintos estados, principalmente, en la zona centro-sur de México.

De acuerdo con el estudio, el promedio de linchamientos anuales a escala nacional es de 32.

“Los linchamientos son producto de falta de acción de las autoridades encargadas de la seguridad pública y de una acusación popular, la cual puede ser cierta o falsa en perjuicio de acusados que no son puestos a disposición de las autoridades”, cita el estudio.

En 2014 se tiene el registro de 63 linchamientos consumados, con especial incidencia en Puebla, Estado de México y el entonces Distrito Federal.

Se da cuenta de picos de linchamientos, es decir, aquellos crecimientos atípicos en la cifra de eventos que se registraron en 1997 con 27 casos; en 2010 con 47 casos; en 2013 con 40, registrándose un promedio de 32 casos por año.

Entre 2010 a 2016 los municipios con mayor índice de linchamientos fueron:

Ecatepec con 39 por ciento; Texcoco con 23 por ciento; y Chalco con 22 por ciento.

La palabra linchamiento proviene de una derivación del apellido del estadunidense Charles Lynch, granjero del estado de Virginia, famoso por las puniciones (penas) que infligía a los criminales durante la guerra de Independencia de 1782.

Lynch era juez y presidía una especie de tribunal irregular para mantener el orden en aquel periodo turbulento de la historia estadounidense.

La Real Academia Española (RAE) define el verbo linchar como “ejecutar sin proceso y tumultuariamente a un sospechoso o a un reo”.

Con información de Milenio.