Suspenden partido en San Luis por violencia en las gradas
Capítulo negro en la historia del futbol mexicano. Esta tarde, el Estadio Alfonso Lastras fue testigo de una escena de llanto, desesperación, gritos e incompetencia que se originaron tras los actos de violencia provocados por la porra de Querétaro y la afición de Atlético de San Luis.
La situación rebasó al operativo de seguridad, los policías y elementos de seguridad privada fueron testigos de la imprudencia de los pseudoaficionados. Volaron toda clase de objetos, desde monedas hasta un tambo de basura. Las butacas fueron desprendidas y arrojadas hasta la cancha. Cientos de personas, invadidas en el pánico, se refugiaron en el césped. Mientras que otras con menos suerte resultaron heridas y tuvieron que ser atendidas por el cuerpo médico que se encontraba en el lugar.
Fue al minuto 84 cuando el silbante Óscar Mejía García detuvo el partido entre potosinos y queretanos por los actos de violencia. Algunos jugadores de la plantilla de Gallos intentaron calmar la situación, sin embargo fue en vano, pues también fueron atacados y de inmediato protegidos en el vestidor, al igual que personal de la televisora que transmitía el enfrentamiento.
Niños llorando, hombres y mujeres tratando de comunicarse con familiares y amigos fue la imagen que enmarcó lo sucedido. Así como el intento de elementos de seguridad por detener a algunos cuantos. A la vez, el grupo porril visitante se desplegó en la tribuna y la policía no logró contenerlos. Hasta el momento no se ha reportado una cifra oficial de heridos, pero fotografías han mostrado a un par de aficionados que fueron desalojados en camilla.
Con información de Medio Tiempo.