Ya son 13 países de América Latina que vacunan a sus menores; México aún no empieza
El Gobierno mexicano debate en abrir la vacunación contra la COVID-19 a los menores de edad desde hace una semanas, mientras que en América Latina 13 países han realizado distintos esfuerzos para inmunizar a este sector, con distintos planes que abarcan desde los dos años —en el caso de Cuba—, los seis —en el de Chile y El Salvador— o a partir de los 12 años, como ocurre en la mayoría de las naciones.
En México, el que los menores no sean inoculados en este momento ha llevado a algunos padres de familia a recurrir a amparos para que sus hijos puedan recibir una vacuna, aunque no se trata del único esfuerzo. Esta semana mil jóvenes de 12 a 17 años, hijos de trabajadores de la Industria Maquiladora de Piedras Negras, Coahuila, cruzaron a Estados Unidos para ser vacunados con inmunológicos Pfizer donados por la Ciudad de Eagle Pass, Texas como parte de un acuerdo.
Por su parte, el Gobierno mexicano ha visto con recelo los recursos legales que se han interpuesto para que algunos menores puedan recibir una dosis contra la COVID-19 una situación que llegó a su punto más polémico cuando el subsecretario de Salud y vocero durante la pandemia, Hugo López-Gatell Ramírez, dijo que estos amparos sólo quitaban vacunas a los adultos. A causa de las críticas que despertó su posición, el funcionario aceptó esta semana que un millón de niños con comorbilidades serán inmunizados.
Hasta el momento no se ha mostrado un padrón de los menores con comorbilidades. De hecho, López-Gatell aclaró al diario La Jornada que sólo tienen identificados a un millón de menores de 12 a 17 años “con cáncer insuficiencia renal o hepática, VIH/sida, con trasplante de órganos, enfermedades congénitas y otras que disminuyen el sistema inmunológico”.
Y pese a que México es un país donde uno de cada 20 niños menores de 5 años y uno de cada tres entre los 6 y 19 años padece sobrepeso u obesidad, padecimientos que incrementaron durante el encierro y que están asociados a una enfermedad grave de COVID-19, el Subsecretario dijo que “es una causa menos frecuente de complicaciones”.
Con información de Sin Embargo.