Protestas y destrucción por huracán ‘Ian’ elevan presión sobre gobierno de Cuba
Las protestas en Cuba por el incremento de las interrupciones del servicio eléctrico y la destrucción causada por el huracán Ian en cuatro provincias en medio de la peor crisis económica de la isla en 20 años, han complicado la gestión del gobierno, según evidencian las constantes reuniones del gabinete.
El ejecutivo evalúa cada día la marcha de la reconstrucción de esos territorios y el presidente Miguel Díaz-Canel ha recorrido al menos seis veces la provincia de Pinar del Río, la más afectada, donde hoy unas 70 mil personas cumplieron 18 días en apagón total y apenas había recomenzado el servicio de distribución de agua potable.
“Vamos a salir de esto y dejaremos las cosas mejor que como estaban, la revolución no dejará a nadie desamparado”, es el mensaje que reitera el mandatario en cada intercambio con los pobladores, muchos de los cuales duermen a cielo abierto o son atendidos por las autoridades u organizaciones ciudadanas de solidaridad.
En Pinar del Río, se contabilizan más de 100 mil viviendas afectadas, 11 mil 524 de ellas destruidas totalmente con un promedio de cuatro personas por casa, y este sábado, la estatal Unión Eléctrica informó que solo 50 por ciento de los 143 mil 012 habitantes de la provincia cuenta con luz.
El 27 de septiembre, Ian atravesó Cuba de sur a norte con vientos superiores a los 205 kilómetros por hora afectando a las provincias de Artemisa, Mayabeque y La Habana, que ya tienen restablecidos sus servicios básicos.
En Pinar del Río, miles de soldados y vecinos, así como especialistas y voluntarios llegados de todo el país trabajan para solucionar los daños.
El ciclón ocasionó tres muertos a su paso y dos técnicos fallecieron en las labores posteriores de recuperación de las líneas eléctricas destruidas.
Con información de Milenio